¿Llevó Yeshúa Cautiva una Cautividad?

 

Un pasaje bíblico que ha inquietado a muchos, es Efesios 4:8-10. En la versión Reina Valera, una de las más leídas, dice:

Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres. Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo.

A simple vista, y como muchos han enseñado, este versículo parece sugerir que Yeshúa, tras morir, descendió a las profundidades de la tierra (interpretado como el infierno). Luego, al resucitar al tercer día, se habría llevado consigo a una multitud de  espíritus que estaban cautivos en ese lugar.

Para entender este pasaje, analicemos tres puntos clave: la palabra "hueste" o "cautivos", la entrega de "dones a los hombres" y el significado de "las partes más bajas de la tierra".

1. ¿Qué Significa "Llevó Cautiva la Cautividad"?

La palabra hueste viene del latín hostis, que significa "ejército". En la Biblia, el término hebreo es tzava’ (ejército) y se usa para referirse a tropas en batalla, ya sean de Dios o del mal. De hecho, a menudo tiene la connotación de "adversarios" o "enemigos".

Cuando Pablo, el autor de Efesios, escribe este pasaje, está citando el Salmo 68:18, que dice:

Tú has ascendido a lo alto, has llevado en cautividad a tus cautivos; has recibido dones entre los hombres, y aun entre los rebeldes, para que el Señor Dios habite entre ellos.

Para los israelitas, el Salmo 68 era un canto de victoria militar. El rey David, con la ayuda de Dios, derrota a sus enemigos y los lleva cautivos. Es una procesión triunfal donde el vencedor exhibe a sus adversarios derrotados.

Pablo utiliza esta imagen para ilustrar la victoria de Yeshúa. Con su muerte y resurrección, Yeshúa no se lleva a un ejército de creyentes cautivos, sino que proclama su victoria sobre Satanás y sus huestes, es decir, los ángeles caídos (demonios), el pecado y la muerte. No se trata de una procesión física de almas al cielo, sino de la manifestación del poder de Yeshúa, quien ha despojado a Satanás de su poder.

La victoria de Yeshúa significa que el Diablo está vencido para aquellos que están en el pacto con Dios. Sin embargo, como nos recuerda 1 Pedro 5:8, el enemigo sigue activo como un "león rugiente" hasta que llegue el momento de su juicio final.

2. ¿Qué Quiere Decir que "Dio Dones a los Hombres"?

Aquí encontramos una aparente discrepancia. En el Salmo 68, el rey recibe dones de los hombres, tanto de sus propios soldados como de los enemigos vencidos. En contraste, en Efesios 4, Yeshúa da dones a los hombres.

Este cambio es intencional por parte de Pablo. Mientras el Salmo 68 celebra la victoria de David y los regalos que recibe, la cita en Efesios 4 se enfoca en que Yeshúa, al ascender victorioso, otorga dones a la humanidad por su gracia inmerecida.

El capítulo 4 de Efesios es un llamado a la unidad de la iglesia. Pablo usa la analogía de los dones para mostrar que el poder del Espíritu Santo (Ruaj HaKodesh) se derrama sobre los creyentes para que puedan edificar el cuerpo de la iglesia, madurando en su servicio a Dios.

3. ¿Qué Son "Las Partes Más Bajas de la Tierra"?

En este punto, Pablo vuelve a usar una referencia del Antiguo Testamento. En Efesios 4:9, dice:

Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra?

Aunque muchos han interpretado esto como el infierno o el sepulcro, Pablo en realidad está citando un modismo hebreo del Salmo 139:15:

No estaba oculto de ti mis huesos, cuando en secreto fui formado, y entretejido en las profundidades de la tierra.

En este contexto, "las profundidades de la tierra" es un modismo para referirse al vientre materno. Con esta referencia, Pablo les recuerda a los creyentes de Éfeso que Yeshúa, en su gloria, se humilló, se hizo carne y fue concebido en el vientre de Miriam (María), tal como estaba profetizado en Isaías 9:6 y Gálatas 4:4. Yeshúa tuvo que descender a nuestra condición humana para poder vencer el poder de la muerte.

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Conclusión

A partir de estas interpretaciones, podemos responder a las preguntas iniciales:

1. ¿Las huestes que lleva Yeshúa son de su ejército o son enemigos? Yeshúa no se llevó a ningún cautivo, sino que, usando el Salmo 68, Pablo explica la victoria de Yeshúa sobre el poder de la muerte y el imperio de Satanás, que ha mantenido a la humanidad en cautiverio desde la caída de Adán.

2. ¿Qué quiere decir que dio dones a los hombres? Es un llamado de Pablo para que los creyentes crezcan espiritualmente y sean uno con Yeshúa. Al hacerlo, el Ruaj HaKodesh se derrama sobre ellos para darles los dones necesarios para edificar en unidad la Congregación de Mashiaj.

3. ¿Las profundidades de la tierra son el infierno o los sepulcros? Pablo no se refiere al infierno ni al sepulcro. Cita el Salmo 139 para explicar cómo Dios, en su plenitud, se humilló para nacer de mujer a semejanza de hombre y así vencer y llevar cautivo al imperio de la muerte y Satanas.

La Biblia no detalla lo que Yeshúa hizo los tres días entre su muerte y resurrección, pero sí es contundente en su mensaje: con su muerte, resurrección y ascensión, Yeshúa proclamó su victoria absoluta sobre Satanás y la muerte (Apocalipsis 20:10, 14).

Shalom