¡Si alguno quiere ser mi seguidor!

 

En Marcos 8.34 encontramos un pasaje que dice:

Entonces Yeshúa llamó a la multitud, junto con sus discípulos, y les dijo: “Si alguien quiere ser mi seguidor, que se niegue, a sí mismo, tome su cruz, y sígame.

Para comprender mejor este versículo, tenemos que ver, primero, que en Marcos 8.34 el Señor lanza un reto “si alguien quiere seguirme”. Recordemos que están en Cesarea de Filipo, tierra de paganismo gentil, por tanto, la multitud era de gentiles.  Esto nos debe hacer pensar que el reto es más para los talmidim que para la multitud, y esto nos lo confirma Mt.16.24

Entonces Yeshúa dijo a sus talmidim: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. 

Podemos parafrasear y decir “Si algún talmidim quiere ser mi seguidor” 

En consecuencia es el talmidim, es decir, aquel que está escudriñando la Torah y la Besorah, quien debe preguntarse si quiere seguir a Mashiaj. Porque seguir a Mashiaj implicará que se niegue a sí mismo y tome su madero de ejecución (cruz).

Negarse a sí mismo es algo muy difícil porque tiene que ver con dejar de ser un carnal, deseando cosas terrenales, cuando aún somos carnales en un mundo terrenal que te empuja y presiona a ser como todos. 

Negarse no significa que tenemos que aislarnos en una cueva o meternos a un monasterio, negarse a sí mismo es perseverar, en conducirse en la vida según las instrucciones de Dios, Su Torah, a pesar de las presiones religiosas, sociales y legales de este mundo. 

Negarse no es dejar de pensar en las cosas que nos pueden dar mejor comodidad en este mudo, pero sabemos que si buscamos primero su reino y su justicia, todas estas cosas vendrán por añadidura. 

Si el Señor nos da cosas materiales, usémoslas como manda la Torah y si nos da familia, cuidémosla como manda la Torah, porque esa es la porción que Él nos da en este mundo terrenal. Y recordemos que esta porción es pequeña comparada con la porción que se nos dará en el mundo venidero. Por eso dice: “en lo poco fuiste fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor”

Hace poco en una conferencia del hermano Eric, me llamo la atención un comentario que hizo una hermana y que me trajo a memoria este tema de negarse y tomar la cruz, el comentario fue el siguiente:

​yo tengo muchos problemas en mi trabajo porque pongo la BONDAD DE DIOS y se ha levantado gran tormenta porque yo dije NO PARTICIPO de abortos, cambios de sexo y eutanasia

Observemos como ella se está negando a sí misma “pongo la BONDAD DE DIOS”. Ella pudo, por querer mantener las amistades y las relaciones sociales en su trabajo, unirse a lo que manda el mundo, pero decidió negarse a sí misma y a los deseos de caer bien y al miedo de lo que podrían decirle o hacerle.

Además, con su sencillo comentario esta hermana nos muestra lo que es:“tome su cruz, y sígame”

Tomar la cruz significa aceptar el rechazo del mundo por poner a la Torah, la Palabra de Dios por delante de cualquier cosa terrenal, más aún un talmidim en su seguir al Mashiaj debe estar dispuesto a morir y morir en muerte de humillación. 

Esto también lo expresa el comentario sencillo de la hermana cuando dice: “y se ha levantado gran tormenta porque yo dije NO PARTICIPO de abortos, cambios de sexo y eutanasia”

En otras palabras, muestra que por negarse a sí misma, está siendo "crucificada" y seguramente se burlaran de ella y buscaran su "muerte social” y humillante en su trabajo, donde puede ser tratada como una abominación por negarse a ser igual a los del mundo.

El reto de seguir a Yeshúa es para todo aquel quiera ser un talmidim, crecerá con Él, pero será rechazado y humillado, como lo fueron los primeros talmidim quienes sufrieron rechazo y humillación.

Por algo Shaul dijo a los Gálatas en 6.14 

Pero jamás acontezca que yo me gloríe, sino en la cruz de nuestro Señor Yeshúa HaMashiaj, por el cual el mundo ha sido crucificado para mí y yo para el mundo.

Note que Shaul está diciendo que para él, el mundo estaba "crucificado" es decir, se está negando a sí mismo respecto a las cosas del mundo. Y cuando dice que él está crucificado para el mundo, estando él en vida, es que está siendo rechazado y humillado a causa de Mashiaj.

Y en Mt.10.22 dice:

Y seréis odiados de todos por causa de mi nombre, pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo.

Shalom