La Creación en los Dos Primeros Días

 


Sabemos que Dios es Eterno y que su morada es eterna, debemos comprender que la Eternidad siempre ha existido junto con Él y que este universo lleno de galaxias, estrellas y planetas incluyendo el nuestro al que llamamos tierra o mundo, no existía como lo conocemos y no es eterno.

Vamos a escudriñar una forma sencilla de comprender cómo se dio la creación de nuestro mundo de acuerdo a la Biblia.

La Eternidad, la morada de Hashem es llamada en la Biblia con varios nombres como: Cielo, Los Cielos, lugares celestiales, Reino de Dios, Trono de Dios, Monte de Dios, Monte de Sión, Morada de Dios, etc. Y en hebreo se le llama Olam, Olam Haba y Qedem. La Biblia atestigua sobre la Eternidad en muchos versículos de los cuales mostrare algunos,                                                  

Salmos 68.33

Cantad al que cabalga sobre los cielos de los cielos, que son desde la antigüedad (קֶדֶם qedem, eternidad); he aquí, Él da su voz, voz poderosa.

Salmo 90.1-2

Señor, tú has sido un refugio para nosotros de generación en generación. Antes que los montes fueran engendrados, y nacieran la tierra y el mundo, desde la eternidad (עוֹלָם Olam) y hasta la eternidad (עוֹלָם Olam)  tú eres Dios.

Salmo 93.2

Desde la antigüedad está establecido tu trono; tú eres desde la eternidad (עוֹלָם Olam).

Por otro lado este mundo donde vivimos no existía como lo conocemosvino a existir producto de la rebelión que hubo en la Morada de Dios, como lo menciona Rev.12.7-9, Luc.10.18. A partir de ese momento y como ocurrió con Coré, Datán y Abiram, Nm.16.31-33, el Cielo se abrió y desde la Eternidad, el כְּר֔וּב מִמְשַׁ֖ח Keruv Mimshaj (ser divino unigido) cayo con todos sus seguidores y posesiones que estaban bajo su responsabilidad, Ez. 28.13-14.  Al caer por el abismo, el Keruv Mimshaj fue transformado y pasó a llamarse שָׂטָן Satán que significa adversario. Cuando esta caída ocurrió, Rev.12.4, todos los escombros y que bajaron de la Eternidad incluyendo a Satán y sus seguidores, quedaron desordenados y vacíos (corruptos). A partir de este momento vino a existir algo diferente al Cielo.


Sigamos el hilo conductor de Génesis 1, para entender el proceso de la creación bíblica de este mundo donde vivimos.

En Gn.1.1 Inicia la Bendita Torah, diciendo en hebreo:

בְּרֵאשִׁ֖ית בָּרָ֣א אֱלֹהִ֑ים אֵ֥ת הַשָּׁמַ֖יִם וְאֵ֥ת הָאָֽרֶץ

Que se ha traducido al español como: 

En el principio creó Dios los cielos y la tierra.

Si observamos bien, este versículo es un anuncio de lo que se va ha desarrollar en todo él capítulo. Como sabemos, la Eternidad tiene un orden establecido por siempre y no necesita ser tocado o modificado, por lo que este primer versículo no se esta refiriendo a la Eternidad sino al anuncio de que Dios organizará  todos los escombros caídos a través del abismo. El verbo בָּרָא bara’ que se ha traducido “creó”, como si se empezara a crear algo de la nada, en realidad se debe leer “organizar” no “crear”. Es decir en este primer versículo Dios esta señalando que vendrá a organizar algo que ya existe. Y lo que va a organizar es  hashamayim (los cielos) y haaretz (la tierra). Es decir dos cosas.

Antes de continuar es clave que definamos algunas palabras importantes para la comprensión de este estudio. La palabra cielo procede del latín caelum y se refiere a la atmósfera, a la esfera que aparenta ser azul y que rodea a la Tierra y al espacio donde se sitúan el Sol, las estrellas, los planetas, etc. En cambio la palabra tierra viene de latín terra y tiene varios usos y significados, puede ser suelo, nación, planeta.  Otra palabra importante para este estudio es universo, que tiene su origen en el vocablo latino universus y es un sinónimo de mundo o también de un conjunto de muchas cosas que existen físicamente.

Volviendo a Gn.1.1, es necesario que comprendamos que este verso no esta hablando ni del cielo azul ni del planeta tierra,  se esta refiriendo al universo de todas las cosas caídas desde la Eternidad.

Dios viene a organizar “בָּרָא bara”,  todo lo que se cayó a través del abismo y eso comprende unos “cielos”, es decir una materia y energía que rodea todos los escombros y  una “tierra” que son los escombros sólidos.

A través de los avances científicos, sabemos que el universo esta compuesto por una materia y energía oscura que rodea a todos los elementos sólidos como, las galaxias, estrellas, planetas, a nuestro sistema solar y al planeta tierra, como pueden leer en este sitio de la Nasa.

Lo que Gn.1.1 esta enseñando es el anuncio de la organización de este mundo, es decir este universo que estaba desordenado.

La Biblia nos muestra cómo estaba el universo para que comprendamos que no se dará una creación sino una organización, es decir poner orden a un desorden, como indica Gn.1.2

Y la tierra estaba sin orden( תֹּהוּ toju sin forma) y vacía (בֹּהוּ en caos, corrupta), y las tinieblas ( חֹ֖שֶׁךְ oscuridad) cubrían la superficie ( פְּנֵ֣י cara) del abismo, y el Espíritu de Dios ( ר֣וּחַ אֱלֹהִ֔ים Ruaj de Elohim)  se movía sobre la superficie de las aguas

Este versículo se debe entender así:

El universo (los escombros) cayeron en forma desordenada y corruptos y las tinieblas (la materia y energía oscura) lo cubrían porque perdieron la Luz de la Eternidad y el  Ruaj  (la Mente, el Poder) de Dios viene a poner todo en orden mediante la organización de todos los componentes que son llamados aguas, porque en la Biblia de acuerdo al contexto, las aguas son multitudes de gente o cosas como lo muestra, Rev.17.15.

Ahora observemos lo que ocurre en Gn.1.3

Entonces dijo Dios: Sea la luz (אוֹר or, luz, brillo). Y hubo luz (Sabiduría de Hashem, Eclesiastés 2:13)

Es importante que vea que la luz ni es creada ni organizada, simplemente Dios la convocó a participar en la organización de los escombros. Esta luz no es luz de sol,  es Luz, la Sabiduría de Hashem, la mente, Ruaj de Hashem que se movia sobre las aguas, multitud de escombros, para organizarlos con sabiduría.

Seguidamente Gn.1.4 nos dice:

Y vio Dios que la luz (אוֹר or), era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.

Aquí ocurre un evento importante, una separación de lo bueno La Luz, la Sabiduría de Hashem y las חֹשֶׁךְ hoshej, tinieblas. Dando a entender que las “hoshej”, tinieblas no son buenas y estarán separadas de lo bueno la אוֹר or, luz, Sabiduría de Hashem, como esta escrito en 2 Cor.6.14.

Luego Gn.1.5 dice:

Y llamó Dios a la luz día, y a las tinieblas llamó noche. Y fue la tarde y fue la mañana: un día.

Hasta aquí el universo (los escombros), esta siendo separados de la Luz de la Eternidad (Sabiduría) y Dios esta poniendo leyes físicas para que todo ese desorden sea ordenado, las cosas reciben un nombre, todo aquello que nos permite ver es llamado día y lo que nos impide ver es llamado noche, creándose el tiempo o la temporalidad, llamado día, pero este día no es un día de 24 horas, es un día bíblico, recuerde que 2 Pedro 3:8 indica que los días bíblicos pueden ser de miles de años, por tanto cuando dice la Palabra, que fue la tarde y la mañana: un día, se refiere a que para nosotros pueden haber pasado miles o millones de años, pero para Dios eso puede ser un solo día sin temporalidad. 

En Gn.1.6  Dios continúa con una separación final de lo que es este universo con respecto a la Eternidad. 

Entonces dijo Dios: Haya expansión ( רָקִיעַ raqia’), en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas.

Recuerde que las aguas representan multitudes. Este pasaje muestra que Hashem anuncia un sello llamado en hebreo “raquia’ “ que en español traducen expansión, pero que podemos entender que se trata de un sello que separa las multitudes del Cielo, de las multitudes que formarán el universo debajo de la raqia’.

Pasando a Gn.1.7 vemos:

E hizo Dios la expansión (raqia’) , y separó las aguas que estaban debajo de la expansión (raqia’) de las aguas que estaban sobre la expansión (raqia’). Y fue así.

Con este pasaje Dios ejecutó lo que ya había anunciado y así se completa la separación, quedando separados el Cielo y este universo o mundo. 

En Gn.1.8 vemos:  

Y llamó Dios a la expansión (raqia’) cielos. Y fue la tarde y fue la mañana: el segundo día.

Este versículo nos muestra que Hashem, al establecer la raqia’ ha dividido totalmente lo que ya existía, la Eternidad de lo que vino a organizar, el mundo o universo. A partir de este momento existen dos mundos, uno arriba de la raqia’ que se llamará Cielo y otro abajo, que no es Cielo. 

Los hebreos nombran estos dos mundos así: Olam Haba, literalmente, “El mundo por venir”,  lo que conocemos como eternidad y Olam Haze, literalmente “este mundo”. Estos dos mundos son mencionados en Ef.1.21

muy por encima de todo principado, autoridad, poder, dominio y de todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo (Olam Haze)  sino también en el venidero (Olam Haba).

Es importante que notemos, que hasta aquí Hashem esta organizando todos esos escombros, poniendo leyes, nombres y sobre todo separando (haciendo santo su Cielo).

Todo esto lo ha hecho en dos días bíblicos, en el primer día separó la luz de las tinieblas, esto es una separación de lo que es eterno incorruptible, de lo que no tiene luz que es corruptible, esta es una separación espiritual y  en el segundo día sella el abismo con la “raqia’ “ y queda el Cielo, la Morada de Dios, separada de lo que no es “cielo” esta es una separación física.

Según los sabios de este mundo este periodo de tiempo que la Biblia muestra como dos días bíblicos deben haber sido más de 13 mil millones de años. Esto lo puede ver en el escrito: El Big Bang de Dios y la Eternidad.

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