144 Mil Parte 2

Sabemos que el número ciento cuarenta y cuatro aparece tres veces en la Biblia, dos veces en el capítulo 14 y una vez en el capítulo 7.

Las dos veces que aparece en el capítulo 14 fue explicado en el escrito Los 144 Mil Parte 1, donde vimos que a Juan le revelan que Yehoshúa se reserva un primer remanente santo y fiel desde antes de la primera venida de Mashiaj y antes la muerte de Juan y después envía tres mensajeros a las congregaciones mayormente gentiles que surgen después del sacrificio y resurrección de Yeshúa, los mensajeros les anuncian que deben perseveren para ser parte del segundo remanente. Los tres anuncios son: 1) Respeten a Yehoshua, 2)la religión que los engaña será destruida, 3) los que se hagan apóstatas serán destruidos con ella.

 

En este escrito vamos a preguntarnos:

¿Quiénes son estos ciento cuarenta y cuatro mil que Juan ve en Rev.7.4?

Escudriñemos

Antes de empezar debemos tener en cuenta dos cosas: primero estos 144 mil, se refieren a las congregaciones que surgen después del sacrificio y resurrección de Mashiaj y segundo estas son las que reciben los anuncios de los tres mensajeros (Rev.14.6-10).

En el capitulo 7 del Libro de la Revelación de Yeshoshúa HaMashiaj encontraremos que Juan ve a cuatro mensajeros que son detenidos por otro mensajero para que no lleven el juicio al planeta hasta que se hayan sellados los siervos de Dios (Rev.7.1-3)

Entonces Juan oye que esos sellados son identificados con un número, ciento cuarenta y cuatro mil, de los herederos de Israel, él oye que ese número sale de contar 12 mil de cada tribu (Rev.7.4-8)

Pero cuando Juan mira, no ve 144 mil, sino una multitud incontable, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en las manos (Rev.7.9)

Esto es un simbolismo de una multitud incontable de los que tienen el “sello de Dios”, la Torah y el Testimonio de Yeshua y están vivos en presencia del cordero con cuerpos que han sido transformados, símbolo de las vestiduras blancas y las palmas en sus manos es un simbolismo de victoria y gobierno.

Juan ve que Aclaman a gran voz diciendo: “¡La salvación pertenece a nuestro Elohim que está sentado sobre el trono, es decir, al Cordero!” (Rev.7.10)

Sigue mirando y ve a todos los mensajeros celestiales rodeando a toda la multitud, pero la multitud que rodean son los ancianos y los cuatro seres vivientes. Esto nos indica que la multitud incontable que tiene el sello de Dios son una representación de las cuatro divisiones del campamento en el desierto (Num.Cap.2). Así que se confirma que no son 144 mil, sino una multitud semejante a la que había cuando el pueblo escogido fue sacado de Egipto. Pero estos son una referencia de las tribus agrupadas bajo las banderas de Efrain, los gentiles y Dan, el juicio.

Entonces todos, los mensajeros y la multitud incontable se postraron sobre sus rostros delante del trono y adoraron a Elohim diciendo: ¡Amén! ¡La bendición, y la gloria, y la sabiduría, y la acción de gracias, y el honor, y el poder y la fortaleza, a nuestro Dios por los siglos de los siglos! ¡Amén! (Rev.7.11-12)

Juan dice: uno de los ancianos, es decir, uno con semejanza de hombre sabio, tomó la palabra y me preguntó: ¿Quiénes son y de dónde vienen éstos vestidos con ropas blancas? (Rev.7.13). Este anciano es Yehoshúa preguntando a Juan, con la intención que él se de cuenta que,  lo que está viendo, es el cumplimiento de su promesa.

Juan mismo nos muestra que él no entendía lo que estaba viendo, por lo que Yehoshúa es quien responde diciendo: “estos con sus cuerpos incorruptibles, vestiduras blancas, son los que vienen de la gran persecución, pero han lavado y blanqueado sus vestiduras con la sangre del Cordero”

Le está revelando que estos “144 mil” son un simbolismo de lo que ocurría en el desierto en tiempos del "primer Éxodo", cuando las divisiones de las tribus que estaban bajo la bandera de Efraín y Dan partían detrás del tabernáculo.  Ahora en el "segundo Éxodo", los gentiles con algunos judíos partían después del sacrificio y resurrección de Mashiaj.

Yeshúa le aclara que ese remanente incontable que está viendo han llegado al cielo porque han lavado y blanqueado sus vestiduras, es decir, dejaron su vieja vida y perseveraron en hacerse semejantes a Mashiaj, por la promesa de la resurrección, mediante su sacrificio.

Yeshúa le explica que gracias a esa perseverancia en la esperanza de la resurrección, esa multitud incontable está ahora ante Su Trono y Él extenderá su tabernáculo, es decir, les hará ocupar espacio en el cielo, donde no hay carencias de nada, ni afectaciones climáticas, sino que serán apacentados por El y tendrán vida eterna sin aflicciones (Rev.7.15-17)

Conclusión

¿Quiénes son estos ciento cuarenta y cuatro mil que Juan ve en Rev.7.4?

No son 144 mil, son el remanente que es redimido después de Juan y representan una multitud incontable de todas las naciones, mayormente gentiles de todas las razas y lenguas que se unirán a todos los que han muertos, mayormente hebreos antes de la venida de Yeshúa.